domingo, 17 de enero de 2010

Una buena noticia y algunas sugerencias

Feliz año a todos. Pido y os deseo salud para todos. Mis fiestas han estado algo pachuchas, aunque todo parece ir a mejor y procuro ser optimista y agarrarme a las cosas buenas. Y una de ellas es que ¡Seré tita en verano! Voy a ser la tita más feliz sobre la faz de la tierra...

Creí que tendría tiempo para crochetear durante mis vacaciones, pero mi gozo en un pozo... Eso sí, los reyes magos me han traído una preciosa colección de lanas y un montón de ganas de pillarlas por banda. Ya os contaré qué haré con ellas. Melchor debió de verme mirar el escaparate de la mercería cada día como un niño mira el de una pastelería. Si es que estos magos están en todo...

También me han traído un precioso libro ilustrado. Es el típico libro que siempre miras en tu librería del alma (Rayuela, en mi caso) pero que no te compras porque... Bueno, no sé muy bien por qué: priorizas otros, no llegas a fin de mes, etc. El cuento es "Donde viven los monstruos" creado por Maurice Sendak en 1963 (y reeditado por Alfaguara en castellano y por Kalandraka en gallego, vasco y portugués). El caso es que se ha hecho muy mediático tras la adaptación de la historia al cine por el director Spike Jonze. Aún no he podido ir a verla, pero estoy loca por hacerlo. Ya os contaré.

Por fin tengo el libro en mis manos y además, como hago habitualmente con mis favoritos, lo he podido compartir con los niños y niñas de mi clase. Siempre me ofrecen una experiencia lectora única y apasionante. Estaban más que dispuestos a inventar un terrible final para Max porque los monstruos "rugieron sus rugidos terribles y crujieron sus dientes terrribles y movieron sus ojos terribles y mostraron sus garras terribles". Sus ojos y bocas abiertas mostraban la mezcla de emociones que el relato les llevó a vivir: miedito, sorpresa e ilusión. Estuvieron atónitos y me dio más pena que a ellos que se terminara el relato. Mañana van a pintar sus propios monstruos... ya vereis lo que son capaces de inventar estos bichitos... Mientras tanto, he encontrado este pequeño corto animado con las ilustraciones originales del autor para que os maravilleis si no conoceis el libro todavía.



Otra referencia más de esas pequeñas joyitas que me remueven por dentro y que no puedo más que compartir con vosotros: hace poquito he descubierto al ilustrador Nacho Gómez y estoy enganchada a sus creaciones. Juzgad vosotros mismos visitando su blog "Estrellas y Caracoles" y soñad con sus imágenes delicadas, etéreas, mágicas.



Una de flores para terminar el post. Ya os he contado antes que colecciono amigas locas, ¡no lo puedo evitar! Podréis comprobarlo si os cuento la última "batallita". Raquel se ha aficionado al exhaustivo y delicado arte de cultivar orquídeas. Esta afición hace que le brillen los ojitos y llene sus días de color. Y como las amigas locas son así de especiales, comparten lo que tienen y te contagian con la luz de sus alegrías. Os dejo con una de sus niñas más hermosas. Un abrazo.

domingo, 10 de enero de 2010

Rainy days

(Este post fue escrito antes de las vacaciones navideñas, pero no lo colgué por cosiñas de la vida...)

A mí, al contrario que a The Carpenters, los días de lluvia no me ponen triste ni me hacen llorar. Bueno, quizas un poco melancólica, pero nos hace tanta falta este agüita... aprovecho para quedarme calentita el fin de semana tomando un tecito, descansando de estos días de locos en el cole (fiestas, actuaciones, reyes magos, nervios, nervios y más nervios) y crocheteando. Esto último es un nuevo intento por conseguir hacer unos patucos de bebé: ¡patrones, no pienso rendirme! Si alguien sabe una forma sencilla de elaborarlos, me vendría bien una ayudita.


También he estado en la feria de artesanía que ponen siempre en el centro de la ciudad. Son una alternativa a los manidos regalos que podemos encontrar en los centros comerciales. Apoyamos a artesanos y artesanas al comprar y encontramos productos especiales, respetuosos con el medio ambiente y "preciocis". Encontré además a buenos amigos y tomé una infusioncita para combatir el frío. También he solucionado más de un regalito. En la foto os muestro este cuadrito de flores secas que los Reyes Magos me trajeron hace un par de años y que dan vida a una de mis estanterías.


Luego me he pasado la tarde viendo fotos en buena compañía: siempre me resulta terapéutico mirarlas una y otra vez y recordar los días a través de las anécdotas que se esconden tras cada una de ellas.

Animada tras ver la película de Hayao Miyazaki, "El viaje de Chihiro", he tenido la oportunidad de comenzar oficialmente mis vacaciones disfrutando de "El castillo ambulante". De nuevo toda la magia y la belleza al servicio del espectador. Y eso que aún no he visto el final (me quedé irremediablemente dormida a pesar de la lucha interna contra mis ganas de dormir a pierna suelta tras un día agotador). La historia de Sophie (una humilde sombrerera) guarda grandes similitudes con la de Chihiro, pero cada una juega con el misterio y la fantasía con un encanto especial y diferente. El valor, la bondad, la constancia... y una heroína sencilla y mágica. Para volar sin movernos del sofá en cualquiera de estas tardes invernales.


Mañana voy río abajo en busca de la familia y los amigos, así que estaré sin conexión unos días. Espero que disfrutéis del calor que genera el estar con los que quieres y te quieren mientras fuera llueve y hace frío. Me siento tan afortunada.

Hasta el año que viene.